AADAM PATEL: La UEFA ha vuelto a mostrar su desprecio por los aficionados al elegir un lugar de difícil acceso para la final de la Liga de Campeones.
Quizás el milagro de Estambul 2005 disimuló los problemas que tuvieron los aficionados para llegar al estadio Ataturk.
Estambul es una ciudad maravillosa llena de alma e historia, pero una vez más, la UEFA demostró su desprecio por los aficionados al elegir una sede de difícil acceso.
El Ataturk se encuentra a 24 kilómetros de Estambul y sólo hay una carretera accesible desde Estambul, por lo que la mayoría de los aficionados tardaron entre dos y tres horas en llegar al estadio.
Algunos llegaron en taxi, mientras que otros dejaron sus taxis y recorrieron a pie los últimos kilómetros para evitar el tristemente famoso tráfico de Estambul.
Otros tomaron el metro, mientras que muchos utilizaron los autobuses gratuitos que salían del centro, ya que a los aficionados se les pidió que llegaran al estadio a partir de las 14.00 horas para un partido que empezaba a las 22.00 hora local.
La UEFA mostró su desprecio por los aficionados al elegir una sede de difícil acceso
El Ataturk se encuentra a 24 km de Estambul y sólo hay una carretera accesible que conduce al recinto.
Algunos simpatizantes llegaron en taxi, mientras que otros lo dejaron y recorrieron a pie los últimos kilómetros.
Desde las siete de la tarde, tres horas antes del saque inicial, empezaron a formarse embotellamientos en el exterior del estadio, y los guardias de seguridad realizaban largos controles de las entradas, incluido el DNI.
En la puerta R, fuera del estadio del Manchester City, los vigilantes del Manchester City admitieron que era un caos que los aficionados intentaran entrar, y que muchos pasaron horas solos en la cola esperando para entrar en el estadio.
Estambul lleva esperando esta final desde 2020, cuando se canceló debido a Covid, y sería injusto que la UEFA se la quitara de encima, pero esta es una sede que sin duda requiere más infraestructuras para albergar una ocasión tan importante.
Sin embargo, a diferencia de las autoridades francesas en París la temporada pasada, las autoridades turcas habían invitado a los británicos a ofrecer su apoyo a título meramente consultivo, lo que ayudó a los miles de aficionados del City que se desplazaron a las afueras de Estambul con la esperanza de ver a su equipo completar un triplete histórico.
Sin embargo, los aficionados siguieron teniendo que luchar y soportar dificultades por el simple hecho de intentar acceder a un partido de fútbol, y para la que es su gran ocasión, fue otra acusación condenatoria de la incapacidad de la UEFA para aprender las lecciones de ocasiones anteriores.
Los autobuses lanzadera que se dirigen al estadio “apenas se han movido” en medio del atasco.
La mayoría de los aficionados tardaron entre dos y tres horas en llegar al estadio.