Pep Guardiola ha enfurecido a los aficionados del Real Madrid después de que una foto rápidamente borrada mostrara al Man City el jefe y su equipo celebrando su victoria por 4-0 sobre Los Blancos el miércoles.
El City humilló al equipo de Carlo Ancelotti y se clasificó para la final de la Liga de Campeones por todo lo alto en el Etihad, gracias a dos goles de Bernardo Silva, uno de Manuel Akanji y otro de Julián Álvarez en el tiempo añadido.
Los hombres de Guardiola se desplazarán al Estadio Olímpico Ataturk de Estambul el 10 de junio para enfrentarse al Inter de Milán después de que el 5-1 en el global de la eliminatoria que establece un enorme marcador contra los 14 veces ganadores de la competición.
Y tras la victoria, Manuel Estiarte -amigo íntimo de Guardiola y parte del cuerpo técnico del City- publicó una foto en Instagram en la que se veía al técnico del City junto a amigos y compañeros levantando cuatro dedos en referencia a la victoria por 4-0, con la leyenda “¿Cuatro?”.
Entre los que se unieron a Guardiola en la foto se encontraban su hermano Pere, el presidente del City, Khaldoon Al Mubarak, y el ex presidente de Argentina Mauricio Macri, mientras lo celebraban en una sala privada del Etihad.
Pep Guardiola ha enfurecido a los aficionados del Real Madrid después de que una foto rápidamente borrada mostrara al entrenador del Man City y a sus colegas celebrando su victoria por 4-0 sobre el Real Madrid el miércoles. De izquierda a derecha: Pere Guardiola (arriba), Martin Edelman (abajo), Abdulla Khouri, Mauricio Macri, Khaldoon Al Mubarak, Alberto Galassi, Pep Guardiola, Joan Patsy (abajo) y Manuel Estiarte.
El equipo de Carlo Ancelotti fue humillado por el City, que perdió 5-1 en el global de la eliminatoria.
La celebración con cuatro dedos hizo referencia al ex jugador del Barcelona Gerard Piqué, que se convirtió en un icono por levantar cinco dedos cuando ganaron al Real Madrid por 5-0 en 2010.
En la foto también estaban los directivos Martin Edelman, Abdulla Khouri, Alberto Galassi y Joan Patsy, miembro de la junta directiva del City Football Group.
La celebración tuvo significado para Guardiola dado que uno de sus ex jugadores en el Barcelona, Gerard Piqué hizo algo similar durante su carrera.
En noviembre de 2010, el gigante catalán derrotó a su acérrimo rival, el Real Madrid, por 5-0 en El Clásico y, en lo que se ha convertido en un icono del fútbol español, el ex defensa levantó cinco dedos en referencia a todos sus goles, una celebración que repitió en momentos similares durante su carrera.
Y los aficionados del Real Madrid no estaban contentos con su ex némesis y sus celebraciones, con la foto borrada apresuradamente por Estiarte.
Uno de ellos dijo: ‘Espero que pierdan la final para que guarden esos cuatro dedos donde mejor puedan’.
Otro añadió: “Vamos Inter”, en referencia al rival del City en el duelo del mes que viene en Estambul.
Otro aficionado enfadado criticó a Guardiola y al City e insistió en que aún les quedaba mucho camino por recorrer para igualar el récord de 14 títulos de Liga de Campeones del Real Madrid.
Las celebraciones de Pep con sus colegas y amigos del City enfurecieron a varios seguidores del Real Madrid
Dijeron: ‘Si anteponen un uno (al cuatro), podrán entender la grandeza del Madrid, 14 Ligas de Campeones… la resaca del 4-0 pasa mañana pero lograr 14 Ligas de Campeones no lo verán sus ojos’.
Otro bromeó: ‘Gran partido, pero por detrás, (están) dejando mucho que desear como siempre. El estilo de Pep es así’.
Por su parte, un aficionado madridista añadió: ‘Esta es la grandeza de este equipo. Hemos ganado a José (Pep Guardiola) en varias ocasiones, el año pasado le demostramos quién mandaba en Europa y ni un gesto del club. Esta es la diferencia’.
Un último aficionado, enfurecido, aseguró que la celebración no le sorprendió: ‘¿Qué esperabas? Es un cule (aficionado del Barcelona) más. Así de cabrones y mediocres son. Ganamos al Barça 4-0 (eliminándolos de la Copa) en casa y el RM no hizo nada. Esa es la diferencia entre un club serio y bueno, ellos’.
Tras la victoria, Guardiola apenas pudo ocultar su alegría por haber vengado en la prórroga la desgarradora derrota del año pasado en semifinales de la misma competición.
Esto es lo máximo, jugar un gran partido contra el Real Madrid en semifinales de la Liga de Campeones.
‘Yo quería este sorteo, porque el año pasado fue tan difícil que teníamos toda la energía allí. Porque se decía que estos jugadores no valían nada, que no tenían carácter.
‘Tengo la sensación de que hemos jugado con dolor en el estómago por lo que nos pasó’.